¿Cómo se diagnostica?

Anemia

El diagnóstico comienza con un importante interrogatorio y examen físico que detecte síntomas o signos que puedan orientar al médico a que la persona esté desarrollando una anemia.

Luego se solicitarán análisis de sangre, como el hemograma que nos dirá principalmente cuantos glóbulos rojos y que nivel de hemoglobina tenemos.

La hemoglobina es una proteína que se encuentra dentro del glóbulo rojo y su valor nos sirve para definir si tenemos anemia. Si bien los valores pueden variar de acuerdo a nuestra edad u otros factores, en líneas generales hablamos de anemia cuando la hemoglobina es menor de 13 g/dl en varones,  menor de 12 g/dl en mujeres y < 11 g/dl en embarazadas.

Una vez que definimos que existe anemia tenemos que investigar la causa, y en este punto comienza otra etapa de estudios.

El interrogatorio va dirigido hacia la búsqueda de antecedentes familiares para poder detectar si puede haber una causa hereditaria, o antecedentes personales que nos orienten hacia el diagnóstico, como por ejemplo nuestros hábitos alimentarios, hábitos tóxicos como el alcoholismo, si notamos heces oscuras que puedan hablar de una hemorragia del tubo digestivo, menstruaciones abundantes, etc.

Luego un examen físico completo puede mostrar algún indicio de la causa de la anemia, como alguna mancha en la piel, un órgano agrandado, algún signo de hemorragia, aspecto de las uñas o la lengua, entre muchos otros.

A medida que vamos orientándonos en la dirección de la causa de la anemia se incluirán los estudios complementarios correspondientes. Generalmente siempre se incluye un análisis de sangre para evaluar cómo está nuestro hierro corporal, ya que la causa más frecuente de anemia es la falta de hierro.

Los exámenes de rutina tanto de laboratorio, como radiografía de tórax o electrocardiograma pueden mostrar algunos signos que nos hagan sospechar su origen.

Otros estudios pueden agregarse si no se ha llegado al diagnóstico de la causa de la anemia. Algunos de ellos son:

Endoscopia

Estudios de endoscopía digestiva para ver si hay algún sangrado.

Biopsia

Biopsia de médula ósea, que es la parte interna de nuestros huesos que produce los glóbulos rojos, para ver si hay algún problema en su producción.

Los controles de salud periódicos y la consulta con su médico frente a la presencia de síntomas son fundamentales para lograr un diagnóstico más precoz reduciendo el riesgo de complicaciones